Despacito…
Realmente la canción de Luis Fonsi "Despacito" ha sido todo un éxito. Es además bien contagiosa. Dondequiera que uno va, al banco, las plazas, la radio, a nivel internacional y hasta en la calle hay gente cantándola. Pero lo que la gente no sabe es lo sabio de la palabra: Despacito…
El ser humano, su naturaleza es ser social, esta condición nos da mucha seguridad y estabilidad para poder vivir en armonía con nosotras mismos. Debemos pertenecer a un grupo, ya sea familia, sociedad y nación. La vida nos genera muchos estímulos (estresores) que son buenos, malos y regulares. Esto puede crearnos una serie de cambios en nuestras vidas, crisis de vida, problemas y situaciones a enfrentar.
Sin embargo, en algunas ocasiones, algo sucede dentro de nosotras o en el mundo en el que vivimos y de repente parece que nos encontramos al borde del caos, las cosas se salen de nuestro control, nos sentimos desorganizadas, incapaces de resolver, con los métodos que siempre nos han dado resultados, las situaciones que estamos viviendo y las nuevas situaciones nos causan angustia y temor: Nos encontramos ante una crisis.
Las crisis se pueden dividir en causas de estresores evolutivos y circunstanciales. Los evolutivos producen cambios internos importantes, físicos y/o psicológicos. Se asocian a las diferentes etapas de la vida, cambios de roles, las transiciones biológicas que en algún momento hemos vivimos. Son inevitables y, si sabemos manejarlas, nos ayudan a crecer y a fortalecernos. Los estresores circunstanciales son cambios importantes que se dan en nuestro ambiente y que nos afectan de manera considerable. Pueden ser pérdida de cualquier tipo: económica, de una persona, la salud o nuestras expectativas.
Los problemas que trae la crisis nos provocan: estrés, angustia y temor. Estas emociones hacen que nos enojemos fácilmente, nos pueden volver agresivas causando sentimientos de frustración, inseguridad y depresión, afectando nuestra salud, nuestras relaciones, nuestra autoestima y autoimagen y lo más importante nos afecta la capacidad para tomar decisiones adecuadas.
Muchas mujeres desean que los problemas se resuelvan rápido, pues no quieren sufrir, asumen tantas responsabilidades y tantos frentes a resolver que se desesperan fácilmente. Las soluciones tienen su tiempo, con paciencia y enfoque se logran. En toda crisis existe un proceso para su solución.
Aquellas mujeres con capacidad de adaptación a los cambios, modificando si fuera necesario su propia conducta para alcanzar determinados objetivos cuando surgen las dificultades, serán las que puedan sobrevivir y continuar hacia adelante en sus vidas. Aquellas que tengan la paciencia del aprendizaje ante la experiencia, que por muy mala que sea es una experiencia, podrán triunfar.
Las mujeres que ante las crisis han sabido enfrentar y aprendido a vivir, tendrá la sabiduría de vivir… ¡DESPACITO!
Nota de la autora:
La Dra. Rose Nina es médico psiquiatra, psicogeriatra con un PhD en neurociencias clínica y experimental. Puertorriqueña que reside en República Dominicana, colaboradora de Mujeres ante la Adversidad. Si deseas escribirle puedes hacerlo mediante su correo electrónico roseninaestrella@gmail.com