Trata humana, pesadilla que viven miles de mujeres (Parte 1)
Tal vez te preguntes que hace este artículo aquí. Para mí, este tema es mi pasión y lo considero mi misión de vida. Desde muy pequeña me involucré con causas sociales y ésta saltó al frente desde el principio. Creando conciencia es un primer paso para poner mi granito de arena en la lucha con la trata humana.
La trata humana es una realidad. No es un mito, no pasa solo en películas o en lugares lejanos a nuestra isla. Estudios han comprobado que existe en Puerto Rico, en muchas ocasiones más cerca de lo que nos imaginamos. Por lo que, no es que no exista, es que no sabemos reconocerla.
La trata humana es el segundo crimen más lucrativo a nivel mundial. Esta horrenda realidad genera ganancias anuales de 32 billones de dólares y se estima que existen entre 21 y 45 millones de personas que son víctimas de ella. La distribución de víctimas de trata humana en Latinoamérica y el Caribe es de 1.8 millones. Estas cifras son estimadas dado que, por la naturaleza del clandestinaje y la magnitud de la problemática, es imposible conocer las cifras reales con exactitud. En el primer estudio de la Fundación Ricky Martin (2010) se logró identificar que en la isla existe la trata humana en las siguientes manifestaciones: explotación sexual (especialmente con pornografía infantil y prostitución), explotación laboral, explotación con fines reproductivos, mendicidad y tráfico de drogas.
La trata humana siempre va a tener un elemento de explotación envuelto en relación a su víctima. Esta se caracteriza por el uso de amenazas, el uso de fuerza, engaños, abuso de poder y coacción dirigidos a que la víctima haga algo de lo cual otra persona va a obtener un beneficio. La explotación puede ser sexual, por trabajos forzados, servidumbre, extracción de órganos, entre otros.
Uno de los porcientos más altos de víctimas son mujeres. Estas sufren agresiones, torturas y violencia, han sido amedrentadas, les han robado su libertad y autonomía; sufren de altos niveles de stress, además están rotas física, mental y emocionalmente. Las mujeres que logran ser rescatadas, tienen frente a ellas un largo camino hacia la sanación. Este camino es arduo, pero no imposible.
Esta realidad es alarmante, rompe la burbuja en la que muchos vivimos. Pero no podemos hacernos de la vista larga. Estas víctimas necesitan ayuda, necesitan que alguien sea un rayo de esperanza en la realidad que viven. Por eso, si sabes de algo sospechoso déjaselo saber a las autoridades pertinentes (Immigration and Customs Enforcement “ICE” 787-729-6969). En tus manos puede estar el salvarle la vida a una persona.
Datos sobre la autora
Gio Blanco, M.A., C.C.C. es una apasionada creadora de conciencia sobre la realidad de la trata humana y los derechos humanos de infancia. Posee una maestría en Derechos Humanos y Procesos Anti-Discriminatorios de la Universidad del Sagrado Corazón. También cuenta con una trayectoria de más de 9 años como tallerista, conferenciante y escritora. Si deseas conocer más sobre trata humana puedes pasar por su página en Facebook “Human Trafficking is not a Myth” o escribe a coachgioblanco@yahoo.com