Gracias... Vida
Hoy seguramente te levantaste dando ¡Gracias! Es posible que dando unas Gracias muy diferente, hoy despertaste estando consciente de cuanto has vivido, pero más aún cuantas cosas has superado, cuantas veces te levantaste y cuantas has comenzado de nuevo. Realmente como muchas personas, hasta me atrevería afirmar como la mayoría de la gente.
Son muchas las personas que no se dan cuenta de cuanto han logrado solo con el simple hecho de haber llegado hasta el día de hoy, vivos, eso seguramente no lo han pensado, pero el solo despertar, ya es un triunfo.
Levantarse para comenzar una nueva Aventura, la misma que trae el día a día. Es muy probable que tienes una agenda preparada con las cosas que hay que hacer en el día, pero siempre dejando un espacio para las sorpresas que inevitablemente te trae este nuevo día.
El día, “el presente”, ese regalo de vida, que te permite un nuevo universo de oportunidades, de crecimiento y conocimientos. Unos pasos más en el andar de la vida que estás viviendo, como un efecto de tus decisiones y definiciones de vida.
Tienes la maravillosa libertad de escoger lo que quieres ser, hacer y hasta como llegar. Cada decisión tomada siempre delineada por tus principios y valores, aquellos que has desarrollado desde el momento de nacer. Acciones que tomaste para llegar donde quieres y sueñas, haciendo todo lo posible para llegar a esa meta, la que te sirve de inspiración.
Nada pasa por casualidad, cada segundo vivido fue un regalo de Dios para ayudarte en ese plan, para el cual has tomado decisiones, planeado, pensado, soñado y visualizado, para el cual Dios ha adornado ese sendero a pasar para lograr llegar a donde has soñado, es ahí cuando la gente dice “que el Universo conspiró” ¡claro que es cierto!, todo gracias a la Mano de Dios.
Y al final del día, antes de dormir, es muy probable revisarás la agenda de lo que tenías pendiente y marcarás lo que tuviste la oportunidad de hacer, seguramente prepararás la agenda de los “To Do” de mañana, dejando espacio para los “To Do” con los que la vida te sorprenda, aquellos con los que no contaste con ellos, pero que tienen que llegar como un propósito en tu vida.
Pero, hay algo que no debes dejar pasar antes de cerrar tus ojos antes de llegar un nuevo amanecer, revisar que aprendiste de lo que llegó sin esperar, de lo que hiciste programado desde antes, que pudiste hacer mejor, como debes accionar en una próxima vez si tu acción fue la correcta o pudiste ser mejor y terminar el día con la misma palabra con que la comenzaste: “¡GRACIAS!”
Notas sobre la autora:
Sylvia De León es escritora, productora de espectáculos, relacionista profesional, madre, sobreviviente, una mujer apasionada de la vida, eterna agradecida de Dios y amante de la vida". Puedes contactar a la autora escribiéndole a sylviadeleonpr@yahoo.com